Vladimir Peniakoff "Popski" (1897-1951) |
Una de las unidades británicas de fuerzas especiales más curiosas de la Segunda Guerra Mundial fue el llamado 1º Escuadrón de Demoliciones, creado en El Cairo en octubre de 1942. Aunque ese era su nombre oficial, la unidad se hizo conocida por otro apodo, que hacía referencia a su peculiar comandante: la llamaban el Ejército Privado de Popski.
Vladimir Peniakoff nació en la ciudad de Huy (Bélgica) el 30 de marzo de 1897. Hijo de un matrimonio de judíos rusos, su padre Dimitri era un brillante científico e inventor, que desarrolló un novedoso sistema para la obtención de aluminio a partir de la bauxita y construyó dos factorías en Bélgica para explotar su descubrimiento. Vladimir tenía una hermana mayor (Eugenia) y una menor (Olga) y era un joven inteligente, que hablaba perfectamente inglés, francés y alemán, y ruso e italiano con fluidez. Cuando estalló la Primera Guerra Mundial, Vladimir estudiaba en la Université Libre de Bruselas y su padre, temeroso de que los alemanes los arrestasen, se lo llevó a Inglaterra dejando a las mujeres al frente del negocio familiar. En Inglaterra, Vladimir asistió durante algunos meses a la Universidad de Cambridge, antes de que su familia se reuniese de nuevo en París en 1915, donde Dimitri Peniakoff colaboraría con la industria armamentística francesa y Vladimir serviría brevemente en el ejército francés, aunque fue herido y pasó varios meses hospitalizado, siendo declarado no apto para el servicio poco después de la firma del armisticio de 1918.
Tras la guerra, Vladimir continuó sus estudios, licenciándose como ingeniero eléctrico en la Universidad de Grenoble y regresó a Bélgica para trabajar en la industria familiar. No obstante, la muerte por neumonía de su hermana Olga en 1921 y un desengaño amoroso le provocaron un estado de depresión y ansiedad que le hizo cambiar de aires. En 1924 se mudó a Egipto, donde aceptó un puesto como ingeniero en una fábrica de azúcar. Su nuevo trabajo no era demasiado interesante ni estimulante, así que Peniakoff se buscó algunas aficiones: aprendió a navegar y a pilotar aviones, aprendió a hablar árabe e hizo numerosos viajes por el desierto del Sáhara, que llegó a conocer bien, al igual que las tribus que vivían en él, hasta el punto de convertirse en miembro de la Royal Geographical Society de Londres. En 1928 se casó con Josephe Ceysens, una mujer belga con la que tuvo dos hijas, Olga (nacida en 1930) y Anne (1932).
Al estallar la Segunda Guerra Mundial, Peniakoff trató de alistarse en el ejército británico. Probó suerte en el ejército, en la marina y en la RAF, pero en los tres fue rechazado, debido a su condición de súbdito de un país neutral. Pero cuando Alemania invadió Bélgica, su status cambió y fue aceptado por el ejército. Su primer destino, debido en buena parte a su dominio del árabe, fue como oficial en un batallón de la Libyan Arab Force, una fuerza militar formada por soldados árabes (muchos de ellos, refugiados libios huidos de la dominación italiana) y oficiales británicos. No obstante, la LAF no dio los resultados que se esperaban y acabó relegada a funciones secundarias. Peniakoff, convencido de que podía ser de más utilidad a los británicos, logró permiso para formar una pequeña unidad dedicada a la infiltración y al sabotaje tras las líneas enemigas, que se llamaría Libyan Arab Force Commando (LAFC). Con una docena de soldados de la LAF y algunos oficiales británicos, Peniakoff, ya con el rango de mayor, partió del oasis de Siwa en marzo de 1942 y durante cinco meses se movió por el área de Jebel Akhdar, recogiendo información sobre las tropas italianas y alemanas, estableciendo pactos con numerosos líderes tribales de la zona, y saboteando las líneas de aprovisionamiento enemigas, haciendo explotar al menos tres depósitos con cerca de 75000 litros de combustible.
Patrulla del LRDG; Peniakoff aparece a la izquierda, sentado tras un árbol |
Una vez tuvo el alta, Popski se presentó ante el coronel John "Shan" Hackett, coordinador de algunos de los grupos de operaciones especiales británicos. Ante la insistencia de Popski, Hackett lo autorizó a formar su propia unidad bajo el nombre de Escuadrón de Demoliciones Nº1. Popski trató de que su unidad quedara adscrita al LRDG, pero su comandante, el coronel Guy Prendergast se negó, porque no se fiaba demasiado de Popski. Además, el Escuadrón necesitaba un nombre clave, fácil de recordar y que no diera pistas sobre sus verdaderos objetivos. A Popski no se le ocurría nada y Hackett, en broma, le dijo "Encuentra un nombre rápido, o lo llamaremos el Ejército Privado de Pospki". Y con ese nombre, Popski's Private Army (PPA), se quedó.
Cap. Robert Park "Bob" Yunnie (1909-1961) |
La idea de Peniakoff era crear una unidad totalmente diferente a lo que hasta entonces había en el ejército británico. Un cuerpo alejado de la rigidez, el formalismo y la inflexible disciplina militar. Una unidad sin saludos ni ceremonias, donde soldados y oficiales vestían de la misma manera, donde se fomentaba el espíritu de equipo, sin sanciones ni castigos; si un recluta demostraba no estar a la altura del resto, simplemente se le devolvía a su unidad de origen. También su forma de actuar iba a ser diferente. Peniakoff había imaginado una unidad pequeña, fácil de manejar, móvil y adaptable, con hombres duros y bien entrenados, dedicada a la recogida de información y al sabotaje, que sin eludir el enfrentamiento con las tropas del Eje, eligiese cuidadosamente las condiciones en las que se producirían dichos enfrentamientos: acciones rápidas e inesperadas, atacar al enemigo donde y cuando menos se lo esperase, y retirarse antes de que pudiera contraatacar. Las acciones del PPA eran cuidadosamente preparadas por Popski y sus oficiales, evaluando toda la información disponible y teniendo en cuenta todas las variables. "La improvisación y la precipitación son ajenas a mi naturaleza, los riesgos desconocidos me hacen sentir incómodo", escribiría más tarde en sus memorias. En buena parte gracias a esta milimétrica planificación, el PPA tendría muy pocas bajas durante sus muchas acciones. Para sus desplazamientos por el desierto, disponían de jeeps armados con ametralladoras Vickers y camiones de transporte de tropas, vehículos que, al igual que los hombres del PPA, eran robustos y fiables.
|
Sin embargo, cuando Popski regresó a su campamento, se encontró con la desagradable sorpresa de que había sido atacado por tribus árabes hostiles que, aunque no habían causado víctimas, si habían quemado los vehículos y robado la mayor parte de sus suministros. Popski decidió entonces dirigirse a Tozeur, un puesto avanzado de las tropas francesas, a casi 300 kilómetros al noroeste de allí. A continuación, el PPA fue transferido al I Ejército Británico, que avanzaba desde el este junto a las tropas norteamericanas del II Corps. Con ellos tomaron parte en la batalla del paso de Kasserine (una de las últimas victorias alemanas), en acciones como el minado de carreteras o la defensa de una posición elevada. No habría tiempo para mucho mas; en mayo, las tropas del Eje se rendían y la campaña del norte de África se daba por terminada. Eso si, el PPA participó aceptando la rendición de unos 600 soldados italianos que se entregaron a ellos.
Una vez asegurada África, hubo que buscar un nuevo destino para el PPA. Se habló de enviarlos a Yugoslavia y de llevarlos a Sicilia utilizando planeadores. Al final desembarcaron con la 1ª División Aerotransportada británica en el estratégico puerto de Tarento en septiembre de 1943. Su misión, una vez la ciudad y su importante puerto estuvieron asegurados, era explorar los alrededores de la ciudad, localizar posibles puntos de aterrizaje para los aviones de la RAF y recoger toda la información posible sobre las tropas alemanas, su número, situación y movimientos. Una misión resuelta brillantemente; además de conseguir la rendición de un general y un almirante italiano, recogieron abundante información sobre los aeródromos alemanes y su actividad y, en un golpe audaz, obtuvieron datos precisos sobre las tropas alemanas en la zona: haciéndose pasar por un sargento italiano interesado en venderle una caja de coñac a un oficial alemán, Popski se infiltró en un cuartel alemán y se hizo con documentos que indicaban el número exacto de soldados alemanes que permanecían en los alrededores de Tarento, además de su localización exacta y las unidades a las que pertenecían.
Tras este éxito, el PPA (que había aumentado el número de sus integrantes hasta unos 80 hombres) se dirigió al norte, dividido en dos patrullas (una al mando de Popski, la otra mandada por Yunnie), llegando incluso hasta las cercanías de Roma. Pero la conquista de Italia no iba a ser tan sencilla. Las líneas defensivas establecidas por los alemanes ralentizaron el avance aliado. Sin mucho más que hacer, Popski reclutó y entrenó nuevos miembros, elevando a 100 el número de componentes del PPA, divididos en cuatro patrullas.
En junio de 1944, la unidad volvió a la acción. Popski planeó un desembarco anfibio tras las líneas alemanas, para realizar acciones de sabotaje y facilitar información a los ejércitos aliados que avanzaban hacia el norte. Bob Yunnie, junto a dos de sus hombres y dos guías italianos, desembarcaron primero para preparar la llegada del resto de hombres. Lamentablemente, el ejército alemán se retiraba hacia el norte, y las carreteras de la zona estaban atestadas de soldados, vehículos y tanques alemanes. El riesgo era demasiado elevado, y así lo consideró Popski, que ordenó suspender la misión. Yunnie permaneció oculto, espiando a los alemanes e identificando blancos para los ataques aéreos, hasta que las tropas aliadas (entre ellas, el propio PPA) llegaron a su posición.
En las fechas posteriores, el PPA actuó en las estribaciones de los Apeninos, con gran libertad de movimientos. Una de sus grandes acciones fue la toma de la ciudad de Camerino, con ayuda de los partisanos italianos. Camerino era una ciudad amurallada, situada en una posición ventajosa y con una guarnición alemana dotada de armamento pesado. Ante estas desventajas, Popski se valió de una ingeniosa estratagema: mediante una serie de pistas falsas cuidadosamente preparadas, hizo creer a los alemanes que el avance aliado estaba a punto de sobrepasar su posición. Ante el riesgo de quedar rodeados por las tropas enemigas, el comandante alemán ordenó evacuar Camerino, que fue ocupado sin lucha.
Vehículo anfibio DUKW |
Soldados del PPA en la Universidad de Padua (1944) |
Soldados del PPA en la Plaza de San Marcos (Venecia) |
Peniakoff, de vuelta al servicio tras perder la mano izquierda |
Bob Yunnie también publicaría un libro sobre su etapa en el PPA; se tituló Fighting in the Popski's Private Army ("Luchando en el Ejército Privado de Popski") y se publicó en 1959. Ben Owen, un joven soldado que se había unido a la unidad en Italia, también escribió un relato de sus andanzas con la unidad: With the Popski Private Army (Con el Ejército Privado de Popski)